IMÁGENES PROHIBIDAS
Capítulo 7:
'Censores y vencidos'
Este séptimo capítulo narra
la historia de la censura en los primeros años
de la posguerra española. El régimen
surgido de la guerra civil estableció un
férreo control sobre el cine, como parte
de la represión general. En 1941 se ordenó
revisar todos los permisos de exhibición,
sometiendo nuevamente a censura todas las películas.
Algunas de las prohibiciones más notorias
de aquella época fueron "Rinconcito
madrileño", porque se consideraba "intolerable"
que su protagonista fuese una madre soltera. Y el
negativo de "Nuestra Natacha", adaptación
de la obra de Casona, fue destruido por orden gubernamental.
Se estableció también una "censura
artística", que impedía la proyección
en Madrid y las principales capitales de aquellas
películas que se considerasen "faltas
de calidad". El programa ofrece como muestra
una secuencia de "La alegría de la huerta".
Los casos más drásticos de censura
política afectaron a "Rojo y negro",
historia de amor entre una falangista y un miliciano
comunista, "Frente de Madrid" y "El
crucero Baleares" cuya copia, tras un estreno
limitado a autoridades militares, fue incinerada.
"Lo que el viento se llevó" no
pudo ser estrenada y de "El rey de los campos
Elíseos" (Buster Keaton) se suprimió
una escena humorística por "inmoral
y provocativa". Entre los testimonios de este
capítulo están los de Marcos Ana,
Ramón Tamames, Emilio Romero, Adolfo Marsillach,
Emilio Sanz de Soto, Marta Flores y Manuel Augusto
García Viñolas.